El planeta al borde del abismo: La alerta urgente de la ONU sobre el estado del clima

En un mensaje alarmante que resuena en todo el mundo, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, ha advertido sobre la crítica situación en la que se encuentra nuestro planeta tras la publicación del informe sobre el estado del clima elaborado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

El titular de las Naciones Unidas ha descrito la Tierra como “al borde del abismo”, emitiendo una llamada de socorro urgente debido al devastador impacto de la contaminación por combustibles fósiles y la necesidad de una acción inmediata para abordar esta crisis.

En su mensaje, Guterres ha destacado los registros alarmantes de temperatura tanto en la superficie terrestre como en los océanos, así como un aumento sin precedentes en el nivel del mar. Señaló que en 2023 se establecieron varios récords de temperatura, y el hielo marino de la Antártida alcanzó un mínimo histórico, siendo un millón de kilómetros cuadrados más pequeño que el récord anterior para esa época del año.

El informe de la OMM, considera la crisis climática como el mayor desafío al que se enfrenta la humanidad, con el año 2023 siendo catalogado como el más cálido registrado y con pérdidas masivas de hielo en los glaciares.

Guterres subrayó la gravedad de la situación, describiendo el impacto del cambio climático como “crudo, brutal y acelerado con una fuerza letal”. Señaló que el clima extremo en todo el mundo en 2023 ya está dejando un rastro de destrucción con miles de muertos, millones de desplazados, cosechas fallidas y pérdidas económicas enormes.

El llamado a la acción del secretario general de la ONU es claro y urgente. Insta a los países, especialmente a los miembros del G20, a acelerar la transición hacia fuentes de energía renovable, y a adoptar planes climáticos nacionales que estén alineados con el objetivo de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados Celsius.

Además, Guterres hace un llamado a proporcionar financiación para la acción climática en los países en desarrollo, incluida la adaptación a condiciones climáticas extremas, así como a establecer sistemas de alerta temprana para proteger a las comunidades vulnerables y a destinar recursos significativos al nuevo Fondo de Pérdidas y Daños.

En resumen, el informe sobre el estado del clima y las palabras del secretario general de la ONU nos recuerdan la urgencia de la situación climática actual. La ventana de oportunidad para actuar se está cerrando rápidamente, y es imperativo que los líderes mundiales tomen medidas audaces y decisivas para evitar una catástrofe climática irreversible.